Está comprobado, el consumo de muchos líquidos, alimentos frescos y vegetales ricos en fibra contribuyen al pronto alivio de los molestos resfriados.
El resfriado es una de las afecciones de nariz y garganta más comunes, que se caracteriza por su fácil contagio e inflamación de las mucosas. Sabemos que se alivia con reposo, y que sus síntomas se aminoran gracias a medicamentos de venta sin receta, pero también es posible lograr mejoría con ayuda de adecuado régimen alimenticio.
Algunas recomendaciones son:
- Consumir alimentos ricos en fibra (contenida en germen y salvado de trigo, pan integral, verduras y frutas con cáscara) y azúcares concentradas, como miel.
- Comer menos cantidad de alimentos, pero 6 ó 7 veces al día.
- Beber cuando menos 2 litros de líquidos diariamente, como agua, tés y jugos.
- Consumir leche entera.
- Comer yogurt con frutas, de ser posible agregándole una cucharada de salvado de trigo.
- Se recomiendan quesos frescos y evitar aquellos que sean secos.
- El caldo de pollo con verduras y el de carne sin grasa benefician la recuperación.
- Consumir hortalizas, principalmente las de hojas por tener mayor contenido en fibra, como acelga, apio, hinojo, espinaca o berro; también son adecuadas las zanahorias.
- Respecto a frutas, deben preferirse crudas, enteras y con cáscara. Las ideales son piña, naranja, kiwi, toronja, mandarina, ciruela, uva, fresa e higo. Es mejor evitar manzana, plátano y membrillo.
- Son adecuados cereales y panes integrales.
- Las legumbres pueden ingerirse, pero con moderación y bien cocidas, para evitar gases intestinales.
Por supuesto, la principal recomendación consiste en consumir muchos líquidos, sobre todo jugos de frutas o licuados frescos, además de reposar, evitar el frío y los cambios bruscos de temperatura y, de ser necesario, recurrir a un antigripal o analgésico para calmar las molestias.