Cómo ir de compras y no morir en el intento
Con la época navideña a la vuelta de la esquina, llegan las compras y con ellas los comercios llenos, las largas colas para pagar, las persecuciones de los dependientes o las prendas sin etiquetar. Avery Dennison, la compañía líder a nivel mundial en materiales para etiquetado e identificación, presenta un decálogo para ir de compras en Navidad sin perder los nervios que se extrae de un estudio realizado por la multinacional americana a más de 1.000 consumidores en toda España.
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Comercios siempre llenos. Si normalmente es difícil entrar en una tienda, comprar e irse, en época navideña es una misión casi imposible. Cuando los consumidores ven un artículo que les gusta, entre que se lo prueban y pagan, pueden perder el triple de tiempo que cualquier otro día del año. Así, lo que normalmente hacemos en 15 minutos puede llegar a alargarse una hora como mínimo. Para evitar las aglomeraciones durante tus compras la mejor opción sin duda alguna es visitar las tiendas a mediodía, mientras el resto de consumidores comen o descansan.
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Lo que más molesta, la larga cola en caja. Aunque se tenga muy claro lo que se quiere, casi siempre se acaba perdiendo mucho tiempo en la cola de la caja. Esta situación es difícil de evitar, ya que quiera uno o no, siempre se tiene que pagar, así que paciencia.
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No hay tallas. En una época en la que se vende tanto, es evidente que muchas veces no se encuentra la talla deseada. A raíz de eso, los consumidores muchas veces se ven obligados a peregrinar de tienda en tienda para buscar una prenda de su talla. Se puede solucionar comprando con tiempo, tiempo antes de que llegue la Navidad y sus aglomeraciones de consumidores ansiosos por comprar.
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Los dependientes insistentes. La tarea del dependiente es satisfacer las necesidades del cliente, pero a veces algunos se pueden exceder. Para los consumidores es muy molesto tener un dependiente detrás continuamente que les persiga a todas partes. Con el objetivo de evitar estas persecuciones desagradables el mejor consejo es mostrarse seguro de lo que se va a comprar, con decisión y paso firme. Para ello lo más aconsejable es planificar las compras con tiempo, visitando los establecimientos con antelación al momento de la adquisición.
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Prendas sin etiquetar. Muchas veces se encuentran artículos sin etiquetar o con un etiquetaje deficiente. Cuando un comprador encuentra una prenda que le gusta pero la etiqueta no está en condiciones, la situación se puede convertir en una odisea. Aparte de no saber el precio, tienes que buscar algún dependiente para averiguarlo, lo que supone una pérdida de tiempo.
Las fiestas navideñas son una época de paz, amor y fraternidad pero también de estrés, compras e idas y venidas. Aunque no hay un recurso para evitar las aglomeraciones, existen soluciones de etiquetaje, de control de stocks y agilización de los pagos en caja como los que ofrece Avery Dennison, que pueden ser la clave para que los comercios eviten problemas de este tipo. Asimismo, el mejor consejo es cogerse las cosas con paciencia y evitar las compras a última hora.
Con la época navideña a la vuelta de la esquina, llegan las compras y con ellas los comercios llenos, las largas colas para pagar, las persecuciones de los dependientes o las prendas sin etiquetar. Avery Dennison, la compañía líder a nivel mundial en materiales para etiquetado e identificación, presenta un decálogo para ir de compras en Navidad sin perder los nervios que se extrae de un estudio realizado por la multinacional americana a más de 1.000 consumidores en toda España.
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Comercios siempre llenos. Si normalmente es difícil entrar en una tienda, comprar e irse, en época navideña es una misión casi imposible. Cuando los consumidores ven un artículo que les gusta, entre que se lo prueban y pagan, pueden perder el triple de tiempo que cualquier otro día del año. Así, lo que normalmente hacemos en 15 minutos puede llegar a alargarse una hora como mínimo. Para evitar las aglomeraciones durante tus compras la mejor opción sin duda alguna es visitar las tiendas a mediodía, mientras el resto de consumidores comen o descansan.
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Lo que más molesta, la larga cola en caja. Aunque se tenga muy claro lo que se quiere, casi siempre se acaba perdiendo mucho tiempo en la cola de la caja. Esta situación es difícil de evitar, ya que quiera uno o no, siempre se tiene que pagar, así que paciencia.
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No hay tallas. En una época en la que se vende tanto, es evidente que muchas veces no se encuentra la talla deseada. A raíz de eso, los consumidores muchas veces se ven obligados a peregrinar de tienda en tienda para buscar una prenda de su talla. Se puede solucionar comprando con tiempo, tiempo antes de que llegue la Navidad y sus aglomeraciones de consumidores ansiosos por comprar.
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Los dependientes insistentes. La tarea del dependiente es satisfacer las necesidades del cliente, pero a veces algunos se pueden exceder. Para los consumidores es muy molesto tener un dependiente detrás continuamente que les persiga a todas partes. Con el objetivo de evitar estas persecuciones desagradables el mejor consejo es mostrarse seguro de lo que se va a comprar, con decisión y paso firme. Para ello lo más aconsejable es planificar las compras con tiempo, visitando los establecimientos con antelación al momento de la adquisición.
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Prendas sin etiquetar. Muchas veces se encuentran artículos sin etiquetar o con un etiquetaje deficiente. Cuando un comprador encuentra una prenda que le gusta pero la etiqueta no está en condiciones, la situación se puede convertir en una odisea. Aparte de no saber el precio, tienes que buscar algún dependiente para averiguarlo, lo que supone una pérdida de tiempo.
Las fiestas navideñas son una época de paz, amor y fraternidad pero también de estrés, compras e idas y venidas. Aunque no hay un recurso para evitar las aglomeraciones, existen soluciones de etiquetaje, de control de stocks y agilización de los pagos en caja como los que ofrece Avery Dennison, que pueden ser la clave para que los comercios eviten problemas de este tipo. Asimismo, el mejor consejo es cogerse las cosas con paciencia y evitar las compras a última hora.