Domingo: Arcángel Miguel.

Amados seres de luz, que trabajan en el Rayo Azul, diríjanme, protéjanme, ilumínenme para ver la luz de mi corazón creando el sendero de los Ángeles por el que caminaré toda la semana. Amada presencia de Dios, que la Luz Angélica ilumine mi corazón. Así sea. (Rayo Azul)