Ángeles del Fuego Violeta, vengan, mantengan encendido el fuego de la liberación, por amor a través de mis sentimientos y pensamientos. En toda mi familia, mi casa, mi colonia, mi trabajo y mi ciudad. ¡Hoy estoy renovado! hoy estoy vivo con esa vida majestuosa dada a mi por el Padre. Hoy puedo convertirme en lo que Dios tiene dispuesto para mí, pues ahora se manifiesta la presencia de Cristo a través de mi. Así sea.